Seguidores

miércoles, 8 de febrero de 2012

¿Sabes?

Últimamente tus cambios de humor me sientan como un dolor de ovarios. No entiendo a que juegas la verdad. Me gustaría que me explicases por qué un día estás encantador y otro día solo hablas con borderias.  No puedo evitar comerme la cabeza con esto, ¿Acaso tengo la culpa yo? Sé que esto es raro, fuimos pareja, y ahora pretendemos ser amigos aunque no vemos que es algo casi imposible, porque el simple hecho de estar hablando contigo me hace recodar que ya  no puedo contar contigo para nada, que no puedo soltarte ‘te quiero’ cuando lo sienta, que ya no puedo besarte cuando me plazca, que ya no puedo hacerte rabiar como lo hacía antes.
Me da coraje que intentemos ser algo que nunca hemos sido porque solo estamos consiguiendo pasarlo mal, al menos yo.  La chispa de todo es que tú no eras así, ¿Por qué tienes que comportante de este modo ahora? 

Me gustaría poder contarte cosas ahora, si estoy mal apoyarme en ti como hacía antes, pero para qué, ¿Para qué me sueltes otro ‘No me importa, no es mi vida’? Pues mira cariño, no quiero ser borde pero ok. Al menos intento mantener la conversación entre nosotros, aunque sean tonterías, pero al menos, estoy hablando contigo.

Yo lo tengo muy claro ya, no pienso hablarte más. Si tú me quieres hablar, pues lo haces y yo seguiré hablándote, pero hablarte yo, ni una vez más. Me conoces mucho, y sabes que soy demasiado orgullosa y cabezota, que cuando quiero puedo ser la tía más borde y cortante que te puedes echar en cara.

He dado mucho por ti nene.  Quizás debería hacerle caso a mis amigos y no preocuparme más por ti… pero no puedo hacerlo. Por mucho que no quiera reconocerlo, te debo mucho. Pero ya, poco importa la verdad.  Dentro de seis días es San Valentín, y hace cinco meses pensaba que lo pasaría con el niño que más he querido en mi vida, pero a día de hoy, como no acelere buscando a otro, pasaré este San Valentín sin nadie.

Quiero pedirle perdón a mi estómago por sentir tantas mariposas contigo. Quiero pedirle perdón a mi almohada por tantas lágrimas derramadas en ella. Quiero pedirle perdón a mi corazón por hacerle tanto daño. Pero sobre todo, quiero pedirle perdón a mi cerebro por no hacerle caso y dejarme llevar por el corazón en vez de por la razón… Y la verdadera razón es que tenemos quince años. No podemos pretender estar toda la vida juntos, porque ahora estamos aprendiendo a vivir, y atarse a una persona significaría no aprender a vivir por completo.
Puede que la gente me siga diciendo que eres gilipollas, inmaduro, imbécil, repelente, un tío que no sabe lo que quiere y que juega con los sentimientos de los demás, un tonto… pero yo te he querido así, por mucho que la gente diga.

Pero ya nada importa supongo. Cada uno seguirá con su vida como lo estamos haciendo ahora, total, no creo que vuelvas a entrar en mi vida como un día lo hiciste.

1 comentario:

  1. Perfecto :)
    Tenia ganas de dejarte un comentario porque me parece super bonito todo lo que has escrito, y sabes p0orque?
    Ami me ha pasado lo mismo, hace 5 meses tambien me dejo mi novio y llevaba casi 2 años con él.
    Por lo que te entiendo perfectamente como te sientes, quieres que todo siga igual que antes,pero sabes que eso no es posible.. y duele, te mata por dentro, se como son esas sensanciones..
    Pero hay que seguir adelante.. y te volveras a caer.. lo volveras ha hacer.. yo desde entonces ya lo he vuelto ha hacer.. y ahora mismo estoy en ese momento en el que me conformo con simplemente ser su amiga.. pero no es posible.Él no quiere que este en su vida.. asi que tengo que ser fuerte y seguir hacia delante.

    Mucha suerte en todo :)

    ResponderEliminar